Por Ana Grimau
Los programas de coche compartido –car sharing- o coche para compartir viajes –car pooling- llevan varios lustros funcionando. Internet además lo ha facilitado y han aparecido numerosas webs que permiten visualizar el recorrido de una persona que tiene vehículo y va sola y que puede compartirlo con otra.
Un estudio del Centro de Transporte de la Universidad de California sostiene que cada coche compartido sustituye 15 vehículos privados, y aproximadamente el 80% de los más de 6.000 hogares encuestados en América del Norte que utilizan el coche compartido se deshizo de sus coches después de unirse a un servicio para compartir.
En 2009 el coche compartido en EE.UU. contribuyó con un ahorro de 482.000 toneladas en la reducción de emisiones de carbono. En EE.UU. en julio de 2011 había 26 iniciativas de coche compartido que agrupaban a más de 560.000 personas que comparten unos 10.000 vehículos.
Incluso si uno no quiere deshacerse de su propio coche, cuando se viaja en una ciudad puede reducir enormemente los desafíos de encontrar aparcamiento con un coche compartido.
El car sharing tiene sus puntos de recogida en parkings municipales.
Haz gestos; los pequeños gestos so poderosos. Haz un gesto para preservar el “Planeta Vivo”.