La empresa privada de car sharing Cambio, de origen alemán, ha logrado atraer la atención de los responsables locales de muchas ciudades alemanas y belgas donde han establecido una red de movilidad integrada al servicio del ciudadano y totalmente integrada con el transporte público.
El sistema de movilidad urbana de Bremen integra nodos multimodales que enlazan transporte público, bicicletas, carsharing y taxis. Servicios de carsharing, urbanizaciones con carsharing propio, ralentización del tráfico en favor de las bicicletas y peatones, tranvías inteligentes y una tarjeta inteligente integrada para el transporte público, el carsharing y las operaciones bancarias.
Esta tarjeta inteligente es un bono de transporte electrónico y a la vez una tarjeta bancaria y la llave de acceso para el sistema de carsharing de la ciudad. Se puede utilizar para reservar coches multiusuario accesibles las 24 horas. Subir en metro, pagar un café y desplazarse en coche puede hacerse de manera sostenible y económica en esta ciudad donde 900.000 habitantes viven y se mueven de manera racional e inteligente.
Cambio cuenta con 40 estaciones en esta ciudad y unos 3000 usuarios de carsharing reemplazando un millar de coches particulares y sus respectivas plazas de parking. La estrategia de Bremen se ha pensado para integrar la función del coche en una red más sostenible de opciones de transporte alternativas que reduzca la dependencia del coche privado.
En Bruselas, Cambio, con 70 estaciones de recogida de vehículos ha integrado perfectamente su sistema de carsharing con el metro y el tranvía. La co-modalidad, término introducido por la Comisión Europea, persigue el objetivo de obtener una combinación óptima y sostenible de medios de transporte.
No es una paradoja, está demostrado desde hace mucho, en muchas ciudades de Europa modelos a seguir, que el uso razonable del coche de alquiler reduce la compra de vehículos y la circulación en la ciudad.
Los mismos fabricantes de coches ya se han dado cuenta de que el futuro de las ciudades reside en el coche compartido. Daimler fue el primero el lanzar su propio sistema de carsharing en la ciudad de Ulm al sur de Alemania con sus Smart. Hace diez años, uno de cada dos jóvenes alemanes de entre 18 y 29 años tenía coche. Hoy, uno de cada tres jóvenes tiene coche. Y el 80% de una encuesta realizada entre 1200 de jóvenes de 20 a 29 años en 6 ciudades alemanas confesó que no desea tener coche en su ciudad ya que el transporte público era una mejor alternativa.
Está claro, la co-modalidad de todos los modos de transporte urbanos e interurbanos es el progreso: metro, bus, tren, tranvía, carsharing, bicicleta… son la combinación perfecta para un futuro sostenible.